Régimen Simplificado de Confianza

 Régimen Simplificado de Confianza (Resico)

El Régimen Simplificado de Confianza es un mecanismo de simplificación fiscal que permite a los contribuyentes cumplir con sus obligaciones fiscales de manera más sencilla. En este blog, explicaremos los fundamentos fiscales de este régimen y cómo funciona.

Fundamento legal: Articulo 113-E, primer párrafo de la LISR,  Articulo 113-E, octavo párrafo de la LISR, Articulo 16 del CFF y artículos 100, fracciones I y II; y 114, fracción I de la LISR.

¿Qué es el Régimen Simplificado de Confianza?

El Régimen Simplificado de Confianza es un esquema de tributación que aplica a personas físicas y morales que cumplen ciertos requisitos y que no rebasan un límite de ingresos anuales establecido por el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Este régimen busca simplificar el cumplimiento de obligaciones fiscales para los pequeños contribuyentes, permitiéndoles realizar sus actividades económicas con mayor facilidad y menor carga administrativa.

Fundamentos fiscales del Régimen Simplificado de Confianza

Para entender los fundamentos fiscales del Régimen Simplificado de Confianza, es importante mencionar que los contribuyentes que se encuentran en este régimen no están obligados a llevar contabilidad formal. En su lugar, deben llevar un registro de sus operaciones diarias que incluya los ingresos, egresos y compras, así como el registro de sus inventarios, en caso de que se dediquen a la venta de bienes.

Además, los contribuyentes que se encuentran en el Régimen Simplificado de Confianza tienen la opción de realizar pagos bimestrales del Impuesto sobre la Renta (ISR) y del Impuesto al Valor Agregado (IVA), en lugar de hacerlo de forma mensual como ocurre con el Régimen General de Ley. Estos pagos bimestrales se calculan con una tasa reducida de impuestos, que se establece de manera anual y que varía dependiendo de la actividad económica que se realice.

Otro aspecto importante es que los contribuyentes del Régimen Simplificado de Confianza no están obligados a emitir comprobantes fiscales en sus operaciones, a menos que el cliente lo solicite expresamente. De esta forma, se busca reducir la carga administrativa y los costos para los pequeños negocios.

Requisitos para pertenecer al Régimen Simplificado de Confianza

Para pertenecer al Régimen Simplificado de Confianza, los contribuyentes deben cumplir con los siguientes requisitos:

• 
  No rebasar el límite de ingresos anuales establecido por el SAT para el régimen (en 2022, este límite es de $2,770,000 pesos).
• Realizar actividades económicas que no requieran de un título profesional para su desempeño.
• No ser propietario o poseedor de más de un establecimiento o local destinado a actividades comerciales.
• No tener más de 10 empleados.
• No realizar actividades relacionadas con la industria de la construcción o de la minería.
• No realizar actividades de arrendamiento o de enajenación de bienes inmuebles.

Beneficios del Régimen Simplificado de Confianza

El Régimen Simplificado de Confianza ofrece varios beneficios para los contribuyentes, entre los que destacan:

• Permite cumplir con las obligaciones fiscales de manera más sencilla y económica.

• Reduce la carga administrativa y fiscal de los pequeños contribuyentes.

• Ofrece una tasa de impuesto reducida para los pequeños contribuyentes.

• Permite la deducción de gastos necesarios para la realización de la actividad empresarial o profesional.

Obligaciones del Régimen Simplificado de Confianza

Además de las obligaciones que implica el proceso de registro como contribuyentes en el Régimen Simplificado de Confianza, existen algunas otras obligaciones que, de acuerdo con la PRODECON, todos los inscritos deberán cumplir. 

Las personas físicas estarán obligadas a:

• Presentar sus declaraciones provisionales a más tardar los días 17 de cada mes. La determinación de este pago será automática, por lo que los contribuyentes accederán inmediatamente a un formulario prellenado con su línea de captura.
• Emitir comprobantes globales por las operaciones realizadas en caso de no solicitar CFDI por sus ingresos obtenidos.
• Presentar una declaración anual en el mes de abril para el ejercicio fiscal anterior.
• Mantenerse activos en el Registro Federal de Contribuyentes.
• Estar al corriente en sus obligaciones fiscales.

Por su parte, las personas morales deberán:

• Llevar su contabilidad de acuerdo con lo estipulado en el Código Fiscal de la Federación.
• Expedir facturas por la totalidad de sus ingresos, gastos e inversiones. Asimismo, resguardarlas y entregarlas en caso de ser requeridas.
• Formular el estado de su posición financiera y levantar inventarios.
• Presentar su declaración anual dentro de los primeros tres meses posteriores a la conclusión del anterior ejercicio fiscal.
• Presentar los saldos insolutos de préstamos al 31 de diciembre del ejercicio fiscal vencido.
• Registrar las operaciones efectuadas con títulos de valor.
• Informar al SAT sobre préstamos y aumentos de capital.

Conclusiones:

En conclusión, el Régimen Simplificado de Confianza es un esquema fiscal que busca facilitar el cumplimiento de obligaciones fiscales para pequeñas y medianas empresas en México. Al simplificar los trámites y reducir la carga fiscal, el resico permite a los contribuyentes enfocarse en el crecimiento de sus negocios y, al mismo

A continuación te dejo un link con un caso práctico de resico con su explicación

Caso práctico Resico